Las dos aplicaciones multimedia desarrolladas se centran en la rehabilitación de los aspectos motrices y cognitivos, respectivamente. En cuanto a la rehabilitación motriz, la aplicación guía al paciente en la realización de los ejercicios de rehabilitación a través de un avatar o personaje virtual. Varios sensores permiten seguir los movimientos de la persona, a la vez que se hacen un análisis cinemático (cálculo de ángulos y medida de la asimetría), que permite verificar si se están siguiendo de forma correcta los movimientos indicados por el avatar. Esta aplicación se puede visualizar tanto en una pantalla de ordenador como a través de unas gafas de realidad virtual. Los resultados se almacenan en una base de datos para que el equipo de fisioterapeutas los pueda interpretar. La interfaz gráfica de la aplicación ha sido desarrollada por LAM, mientras que el SIMM Lab se ha encargado de la integración del sistema de captura.
En cuanto a la rehabilitación cognitiva, los investigadores del LAM han creado una aplicación que simula la compra en un supermercado mediante un entorno de realidad virtual inmersivo. De este modo, el paciente entrena las capacidades cognitivas principales (memoria, coordinación y atención) de una manera amena, en un entorno habitual de la vida cotidiana.
Profesionales de la Asociación Diversidad Funcional de Osona (ADFO) han asesorado a los investigadores del proyecto en cuanto a las afectaciones físicas y cognitivas asociadas a la enfermedad y han seleccionado los ejercicios a desarrollar teniendo en cuenta parámetros como los ángulos de movilidad o la información a recoger y valorar.
El trabajo desarrollado en esta primera fase dio paso el mes de mayo en una prueba práctica de la tecnología con personas afectadas por un ictus, una sesión que sirvió para captar aspectos como la comprensión del funcionamiento de las aplicaciones por parte de los pacientes o la dificultad de los ejercicios planteados. Ahora, los investigadores se encuentran en fase de valorar esta información para mejorar las aplicaciones. Asimismo, está previsto realizar una segunda prueba práctica para acabar de perfeccionar la tecnología antes de la transferencia al mercado.
El proyecto ha contado también con el apoyo de la empresa VISYON.